miércoles, 7 de enero de 2015

¿Cuántos panes tenéis?

Tu fe te permite ver no sólo al profeta que había de venir, sino a la Palabra de Dios que se ha hecho alimento para ti, que eres su Iglesia, su amada. Tu Dios se ha fijado en ti, en los humildes del pueblo, en los hijos del pobre, y tú das testimonio de que Él ha saciado tu hambre de justicia, ha remediado tu necesidad de paz, se ha fijado en la humillación de su esclava. Tu Dios se ha hecho buena noticia para ti, y tu corazón desborda de alegría.

No hay comentarios:

Publicar un comentario